La importancia de instalar una puerta automática en nuestro garaje
Hace algunas decadas parecía impensable que una pesada puerta de hierro pudiera abrirse de forma automática, con toda suavidad y seguridad. Hoy en día es algo habitual, gracias a automatismos de nueva generación, que funcionan de manera rápida, segura y con un mantenimiento sencillo, y a la utilización de otro tipo de materiales, basados en aleaciones metálicas y plásticos igual de resistentes y mucho más ligeros.
De este modo, un sistema automático con unas medidas básicas de seguridad, como células fotoeléctricas, cables de seguridad y sistema paracaídas y elementos que eviten la introducción de manos o dedos en cualquier resquicio, dotan a las puertas de garaje de una elevado nivel de seguridad, mejor que las operadas de modo manual, y además requiere de menos esfuerzo físico entrar y salir con el vehículo.
Son fáciles de instalar y tienen un sencillo funcionamiento, además poseen las siguientes características:
- Seguridad. Estas puertas automáticas cuentan también con un dispositivo que aumenta la seguridad a través de fotocélulas y sensores de detección de obstáculos, existiendo también algunos sistemas que incluyen en el motor un sistema “antiaplastamiento”, en cuanto toca un obstáculo se detiene y vuelve a elevarse. Con este sistema dejarás de preocuparte sobre todo si tienes niños o animales en casa e inclusive para proteger tu coche.
- Comodidad. Entre las principales ventajas de instalar una puerta automática en el garaje se destaca la comodidad de llegar a casa o a la empresa y abrir la puerta sin bajarte del vehículo, evitando no solo las inclemencias meteorológicas sino también posibles robos.
- Instalación, mantenimiento y vida útil. La vida útil de las puertas automáticas de garaje es larga y por ello el coste que deberás desembolsar para su compra e instalación se amortiza en poco tiempo, siempre y cuando elijas una empresa confiable del mercado y que se especialice en estos dispositivos.
Además de todas las características citadas anteriormente, instalar una puerta automática trae consigo un ahorro energético puesto que instalar bien una puerta de garaje, te aísla contra el frío o calor. La durabilidad de estas puertas es netamente superior a la media puesto que al estar recubiertas de acero y aluminio, la resistencia es mayor.
Por último, antes de comprar la puerta y pagar también su instalación asegúrate que la empresa ofrece el mantenimiento periódico del sistema, como también la reparación en caso de rotura o problemas propios del paso del tiempo, una garantía que se hace imprescindible ya que así proteges tu inversión.